Pensamiento uno

Desde que descubrí el camino hacia la luz, no paro de rebotar contra la lámpara.















UPCN Feria del libro 2018

UPCN Feria del libro 2018
Presentación de "La marca de Gualeguay 1".

Pensamiento dos

A tener en cuenta: la felicidad es un arte efímero.

lunes, 1 de julio de 2013

Una historia para Julia (XLII)

Después de despertarte por última vez en tu cama, cerca de las cinco o seis de la mañana, pasás a dormir un rato más en la cama grande. Cuando despertás en cancha de 11 te gusta jugar entre nosotros: hablás, gateás, te cuento que aprendiste a gatear después de aprender a caminar, y llevás a cabo tu primer show de monerías. Existió el día en que desperté y vos estabas sentada bien cerca de mi cabeza. Me ganó el bostezo. Vos terminabas de sacarte una media: el movimiento fue perfecto, la guardaste en mi boca. En otra mañana, mientras mamá Evangelina preparaba la mamadera en la cocina, ocurrió la siguiente escena. Estabas sentada y te dejaste caer sobre la almohada. En un segundo empezaste a hablar en tu idioma indescifrable. Tuve la segura impresión de que en tu lengua había oraciones, expresiones claras y que tu palabra transmitía sensaciones que alguien entendía. Tuve la impresión de que charlabas amigablemente, tus brazos en movimiento reforzaban mi idea. En todo momento mirabas al techo. Explicabas andá a saber qué cosa o contabas una historia, que de eso se trata esta vida. Catorce meses y parecías sentada a una mesa de café. Habrás hablado un par de minutos, después el silencio, tu mirada, la sonrisa, el misterio, tu regreso a la cama.