Pensamiento uno

Desde que descubrí el camino hacia la luz, no paro de rebotar contra la lámpara.















UPCN Feria del libro 2018

UPCN Feria del libro 2018
Presentación de "La marca de Gualeguay 1".

Pensamiento dos

A tener en cuenta: la felicidad es un arte efímero.

viernes, 31 de enero de 2020

Asociación de Poetas Argentinos: 30 años


APOA es la escritura de un poema herramienta, un poema sociedad. Una escritura que nace desde el impulso -el murmullo de la tinta, íntima garúa, entre las almas del solitario- hasta ser palabra/ofrenda que se integra a la sociedad.
En el Margot, en una mañana de diciembre, dijo el hacedor de APOA: Cayetano Zemborain: Soy su fundador. En el 89 existía la SADE, la Fundación Argentina para la Poesía; se editaban antologías, pero no había “asociados”. Yo vivía en Quilmes, estudiaba Derecho y escribía poesía. Conocí gente. Podía haberla fundado antes, pero no quise hacerlo en dictadura. Al final fue el 1 de diciembre de 1989, un año paradigmático: la caída del muro de Berlín, la implosión de la nueva Rusia.
Detalles memoriosos: Entre los primeros asociados nombro a María Rosa Lojo, María Rosa Maldonado, Adalberto Polti, Carlos Weisse: que fue muy importante en la Asociación. Santiago Rubinstein -estábamos en El Foro- me dijo que se iba de la Asociación de Abogados, y que fundaba la Sociedad de Derecho Laboral; le anuncié que yo fundaba APOA. Hicimos los trámites y salieron las dos.
Cayetano sigue el impulso, quiere contar la Asociación, pintar, poemar, su paisaje. Los objetivos de APOA: Primero tratar de difundir y promover la poesía argentina y extranjera; nuclear a los poetas; después la impronta de un rol solidario: cuestiones de salud, facilitar la gestión de quien asume la poesía como parte de su vida. Luego se dieron ciertas circunstancias, como nuestro compromiso social: ingresar en las escuelas y colegios con los poetas para llegar hasta los chicos. Fueron muchos años de actividad. Generamos propuestas innovadoras como el Bus de Poesía, que se estacionaba un sábado en la puerta del Teatro San Martín para que ascendiera el pasaje ya inscripto; íbamos a buscar a los poetas designados -esperaban en cafés notables- que pasaban a leer dentro del colectivo escolar que alquilábamos.
¿La idea fue salir a la calle?: Exacto, poesía viva en la calle. Nos acompañó, entre otros: Luis Calvo, que venía haciendo cafés literarios. Así hicimos Poesía en la Calle, la primera presentación fue en la plazoleta Roberto Santoro, desaparecido en 1977. En estos encuentros se acercaban los vecinos, escribían los niños, se leía, se hacía la poesía de cordel; la municipalidad facilitaba el escenario y el sonido.
APOA extiende su poema: En 2005 organizamos nuestro Primer Festival de Poesía. Contó con la presencia de María Teresa Andruetto de Córdoba, Olga Zamboni de Misiones, Carlos Rojas de Santiago del Estero, Jorge Leónidas Escudero de San Juan, y tantos otros. Chiquito Escudero pidió que el coordinador de su entrevista fuera el poeta Leopoldo “Teuco” Castilla, hijo de su amigo Manuel J. Castilla. Teuco se subió al avión y dijo presente.
Educación y poesía: Ideamos las Olimpíadas Colegiales de Poesía. Participan alumnos de todas las provincias, los seleccionados vienen a CABA, y en la Legislatura se realizan las finales, asociadas a talleres para docentes, y lecturas propuestas por los chicos o material que facilita APOA. Llevamos 20 olimpíadas. En agosto de 2020 es la próxima. También hacemos el Festival de la Juntada, que lleva 10 años. Al principio fue nacional, ahora es La Juntada Festival Internacional de la Joven Poesía (hasta 35 años). Gran cantidad de poetas pasan por Buenos Aires, de las provincias, la región y el mundo. Se acude a las cárceles, a lugares de salud mental, a las escuelas, a los bares, a la ESMA; se hace base en la Manzana de las Luces y en la Legislatura porteña. APOA tiene su café literario: cada segundo miércoles, en Rodríguez Peña y Lavalle: en el Bar Lavalle dieron charlas varios poetas: Marcos Silber, Rubén Derlis, Eugenio Mandrini, Vicente Zito Lema, Rafael Vásquez. Ahora queremos convocar a los poetas de los pueblos originarios. APOA tiene un archivo de voces impresionante, una notable hemeroteca de poesía, y una biblioteca importante. Estamos buscando un lugar físico para poner todo este material a disposición del público e investigadores.
Asociar desde el impulso, sumar, acompañar, abrazar: Impulsamos algunas leyes, también acompañamos la ley de preservación del bandoneón argentino. Acompañamos a la SEA (Sociedad de Escritores Argentinos) -a la que ayudamos a fundar- y se consiguió el reconocimiento a la labor del escritor, un aporte mensual para aquellos residentes en Buenos Aires que acrediten haber publicado 5 libros. En 2009 consideramos que debíamos juntarnos con otras entidades para dejar más a la vista la Cultura y sus manifestaciones. Fue así como nació Facra (Federación del Arte y la Cultura de la República Argentina). Así como Facra tiene su propuesta Curar por el Arte, desde hace años, APOA está en el Moyano. Miércoles por medio se visita a las internas. Van los poetas a compartir el momento, a brindar talleres, tomar mate, y generar poesía entre todos. Allí instalamos la biblioteca María Meleck Vivanco que coordina Daniel Grad, otra de las personas importantes de APOA.
Afirma Cayetano Zemborain: APOA es una Asociación humanista, que se compromete con la persona del poeta y sus necesidades. Y destaca a personas fundamentales en la vida de APOA: Juana Moyano, Silvia Pastrana, Carolina Rodríguez, Luis Ferrero, Beatriz Allocati, Esther Pagano, Mabel Kril, Nora Quiroga, Dora Roldán.
Festejo en diciembre: Llevamos convocadas 23 cenas de los poetas; el 7 de diciembre, en la última, festejamos los 30 años. Hubo plaquetas para Lojo, Maldonado, Weisse, Polti, Julio Bepré, Marcelo Actis, Adolfo Ponti, un recuerdo como miembros fundadores.
Poesía en papel y poesía oral, sintonías de APOA: Todas las actividades nos fueron marcando. Llegamos hasta la revista de poesía: “La Guillotina”, lleva casi 30 años de vida; nació en una reunión de comisión en La Giralda. Actis y Weisse apoyaron el nombre fuerte. Salió como revista/libro, después fue tabloide, y luego retomamos el primer formato. El formato libro se guarda más que un periódico. Hicimos también una revista oral. Íbamos a un estudio: lectura de poemas, entrevista, ensayo. Se llamó “La Gotera”, título de un poema del querido Máximo Simpson. El primer soporte fue el casete, después cd, una hora de poesía que presentaba Luis Colombini. Recuerdo que invitamos al poeta correntino Coco Madariaga. Pensamos reeditarla, claro que habrá que ver el soporte tecnológico.
Asombra la larga vida de La Guillotina: Si uno mantiene las entidades, las cosas persisten, los grupos muchas veces se disuelven; la Asociación guarda una memoria precisa de las intenciones y logros. Consulto sobre el sostén económico: Nos mantenemos con la cuota del socio, que hoy es de 150 pesos, que no alcanza, y entonces se completa con lo propio.
Cayetano Zemborain habla de APOA, del valor del apoyo solidario al poeta, destaca poetas, la palabra del otro, la necesidad de la real existencia del otro, pero nada dice de su quehacer de escritura. Solo a propuesta del cronista, habló en primera persona: Soy poeta –“Extrañas noticias” y “El reloj manuscrito”- y ensayista. Estoy trabajando en un ensayo donde reúno los distintos lenguajes (teatro, pintura, matemática) que aparecen en la poesía. En “La insensible poesía” trabajo los distintos sentidos, digo que la poesía termina siendo visual y auditiva, y que se pierden ciertos sentidos aún no constituidos (gusto, olfato, tacto); creo también que casi toda la poesía tiende a lo narrativo, siempre hay algo que se está contando. Zemborain conduce el programa radial El búho de Balvanera y es presidente de Facra.